EL Molino de Aceite
Nuestra Historia
En el corazón del Valle del Genal, en la Serranía de Ronda, Málaga, se encuentra la finca El Molino de Aceite, un lugar cargado de historia y encanto. Hace muchos años, la finca era el hogar de una familia dedicada a la producción de aceite de oliva. El molino, robusto y rústico, era el alma del lugar, donde las aceitunas recogidas de los olivos centenarios de los alrededores se transformaban en el dorado líquido que tantos valoraban.
La familia vivía con alegría y esfuerzo, sus días marcados por el ritmo de la cosecha y la molienda. Los niños jugaban entre los olivos y el aroma del aceite recién prensado impregnaba el aire, mezclándose con los cantos de los pájaros y el murmullo del río Genal. Las noches eran iluminadas por el resplandor de la luna sobre las montañas, y el hogar, aunque sencillo, estaba lleno de calidez y tradición.
Con el paso del tiempo y el advenimiento de nuevas tecnologías, el viejo molino cesó su actividad. La familia se dispersó, buscando nuevos horizontes, y El Molino de Aceite quedó en silencio, guardando entre sus paredes los ecos de risas y trabajo arduo.
Años más tarde, alguien vio el potencial en ese rincón olvidado del valle. La finca fue restaurada, respetando su esencia original, y transformada en una casa rural. Ahora, El Molino de Aceite es un refugio para aquellos que buscan desconectar del bullicio urbano y sumergirse en la tranquilidad de la naturaleza. Los huéspedes son recibidos por la vista de los olivos, el sonido del río cercano y la serenidad de un paisaje que parece detenido en el tiempo.
El interior de la casa conserva detalles de su pasado: las vigas de madera, las paredes encaladas y, en un rincón especial, una pequeña exposición del antiguo molino, como homenaje a su historia. Los visitantes pueden pasear por los senderos del valle, disfrutar de la rica gastronomía local y descansar bajo el cielo estrellado, sintiendo la misma paz que una vez sintió aquella familia de molineros.
El Molino de Aceite es más que una casa rural; es un lugar donde el pasado y el presente se entrelazan, ofreciendo a cada visitante la oportunidad de crear sus propios recuerdos en un entorno que celebra la vida sencilla y la belleza natural del Valle del Genal.